sábado, 8 de enero de 2011

SE FUE A LA PLAYA

Dejó las flores en el florero,
el césped sin cortar,
los sillones sin acomodar
y la ropa sin secar.


Horas de diversión y
momentos de emoción
ofrecían el combo playero.


Regresó confiado que todo
iba a estar tal como lo
dejó al marchar.


Sorpresas inesperadas
aguardaban su llegada.


Las margaritas cafés
se vislumbraban.


Una sabana vieja
cobijaba los sofás.


El césped repleto de
maleza e insectos
se encontraba.


La ropa en una
gran maleta
bien acomodada.


Bon vogaje...


Mi corazón replicaba...


Pues dentro de él,
ya no habitaba...


Autor: MSR. 07-01-11.

miércoles, 5 de enero de 2011

UN LIBRO SE ESCRIBIO.


Dios me dijo lo siguiente:
"Te entrego 365 páginas en blanco,
ahi puedes escribir lo que tú quieras".
Y así fue.

Una historia con abundancia de risas,
lágrimas, trabajo, obstáculos y aventuras.

La narración incluyó varios capítulos,
algunos más largos que otros.

Me gustaría contárselos todos,
pero el tiempo se me escapa y solo
puedo hacerles un breve resumen.

Frente a un país, mi voz les comentó
como se movía la bici, la bola viajaba o
la mascarada a cual ritmo bailaba.

Con el pincel de la solidaridad y ayuda
al prójimo, dibujamos sonrisas en los rostros
de un grupo de ciudadanos de oro.

A la luz de la luna, la computadora fue mi fiel
compañera y mi imaginación mi última consejera.

Cupido hizo de las suyas, me robó suspiros y me
metió en líos al flechar mi corazón.

Los amigos del pasado pertenecieron a mi presente
y nuevos conocidos construyeron mi futuro.

Encontré una pluma y un papel, para escribir mis días
y los sentimientos a flor de piel.

Corrí una carrera de obstáculos, donde luego de cada caída;
aprendí a levantarme con mucha más fuerza.

A 33 hombres que no conocía, los hice parte de mi vida,
ya que me hicieron llorar y celebrar con su milagro.

Se acabó el tiempo de compartir con el archivo, las fotocopias
y el vivir entre un mundo de papeles; esta etapa donde
los aprendizajes y los retos me dieron valiosas
armas para caminar en el futuro.

Tomé café, dirigí un acto, le sonreí a un extraño,
en tele aparecí, grite por la calle, a un doctorado asistí,
cerré un lugar y de saco y traje me vestí.

Pues hoy, el de Arriba me dijo: "Ponle punto final al cuento,
dámelo y yo lo archivaré, ahora toma estas nuevas páginas
y comienza de nuevo a escribir.

AUTOR: MSR. 31-12-10